Ha ocurrido poco antes de las cuatro de la madrugada. La Policía Local recibió un primer aviso del presunto homicida. Cuando llegó al domicilio conyugal, la víctima ya había fallecido. El agresor permanecía en el interior de la vivienda, con heridas en cuello y brazos. Según fuentes de la investigación, intentó quitarse la vida con el arma blanca con el que minutos antes había matado a su mujer.
El homicidio ocurrió en el número 18 de la calle Garganta de Buitreras, en una unifamiliar de un barrio tranquilo de la ciudad. La pareja tenía un hijo en común, un chico de 22 años que vivía en Sevilla, donde cursaba estudios universitarios.
No constaban denuncias previas. El nombre de la víctima, Raquel G.B., tampoco figura como usuaria ni del Instituto Andaluz de la Mujer ni de los servicios municipales de atención por violencia de género.
Las mismas fuentes apuntan a que la pareja había salido esa noche. Cuando regresaron al domicilio se inició una pelea que acabó de manera trágica. Estaban solos en la casa, ya que el hijo de ambos se había quedado en la capital hispalense a pasar el fin de semana.
El supuesto asesino, ya detenido, fue trasladado al hospital por los servicios de emergencias sanitarias. Pocas horas después, en torno a las ocho de la mañana, se le condujo a la comisaría. El agresor no tenía antecedentes penales ni había sido denunciado con anterioridad por algún otro motivo. Fuentes de la Policía Nacional añaden que ni el entorno familiar ni vecinal había percibido que pudiera haber una relación violenta entre ambos o que la víctima sufriera malos tratos.
La muerte de Raquel ha provocado gran consternación en la ciudad. Víctima y presunto asesino se conocían desde que eran pequeños. Estudiaron en el mismo colegio, un centro inglés cerrado años atrás.
El Ayuntamiento de Jerez ha decretado un día de luto oficial en el municipio y ha convocado para este lunes una concentración de repulsa a las puertas del Consistorio en memoria de la víctima, que hoy, siete de abril, hubiera cumplido 44 años.
Se prevé que el supuesto homicida, que apuñaló a su mujer con un arma blanca de grandes dimensiones, pase a disposición judicial mañana lunes.
Tras conocerse el crimen, la alcaldesa de Jerez, María José García Pelayo, mostró su repulsa y consternación por el asesinato y transmitió sus condolencias a la familia en nombre de la ciudad.
Es la quinta mujer que muere en Andalucía víctima de violencia machistaen lo que va de año, aunque dos de los casos siguen investigándose. En los primeros meses de 2014 han fallecido cuatro personas en Pozoblanco (Córdoba), Torremolinos (Málaga), y en las localidades gaditanas de Chiclana y San Roque. Son estos dos últimos casos los que permanecen abiertos. En la urbanización Sotogrande una madre y su hija de seis años aparecieron muertas mientras que el cónyuge y supuesto asesino fue hallado muerto en el calabozo. Mientras, en Chiclana, se practican pruebas periciales para determinar con exactitud la autoría de los disparos que causaron el fallecimiento de una mujer y su pareja.